La creación de una etiqueta no se trata sólo de la maquila y el aspecto mecánico o automatizado, sino que va mucho más allá. Es una muestra del arte gráfico puesto a disposición de la mercadotecnia y de la funcionalidad, ya que se necesita entender tanto al producto, como a los consumidores y el uso que le darán al mismo. Es un proceso complejo, por ello, en este artículo te damos seis ejemplos de etiquetas de productos y profundizamos en sus particularidades.
Si bien todas las etiquetas comparten rasgos en común, cada una de ellas debe ser concebida como un complemento del envase, de manera que una de sus principales funciones es adaptarse a las propiedades del empaque, teniendo en cuenta el producto que se contiene.
Por ejemplo, si se trata de envasar un limpiador líquido que se distribuye en un envase de poliestireno soplado, es necesario que la etiqueta sea resistente al agua y a los posible derrames de su uso o traslado, además de ser tan flexible como la botella que se utiliza para contener el producto, de tal forma que una etiqueta en BOPP sublimado sería lo ideal, ya que no contiene tintas sublimes al agua y es totalmente resistente a las características de la sustancia que se comercia.
De la misma forma cada etiqueta debe cumplir primero con una tarea de funcionalidad y posteriormente de estética.
Etiquetas de productos de belleza
Uno de los más notables ejemplos de etiquetas de productos, son las utilizadas en la industria cosmética, ya que en este rubro se suelen emplear dos tipos de envases: las botellas de plástico para cremas, limpiadores y otros productos, así como los frascos y envases de vidrio para maquillajes, lociones, y distintos artículos con base en aceite.
En el caso del plástico, como indicamos en el ejemplo, las etiquetas de BOPP (polipropileno orientado biaxialmente) son la mejor opción para aprovechar las virtudes y características del envase, tales como la flexibilidad.
Por su parte, los frascos de vidrio a menudo son utilizados por su capacidad para salvaguardar la calidad de los cosméticos, sobre todo cuando se utilizan filtros contra los rayos UV para prevenir la oxidación de los compuestos orgánicos. En este caso, se puede optar por etiquetas de papel, como el couché esmaltado, mismo es capaz de resistir derrames de productos oleicos gracias a la capa sintética que se le añade.
Etiquetas de productos de limpieza
Cuando se trata de productos de limpieza, la elección puede ser más sencilla, ya que el BOPP es el material más utilizado debido a su impermeabilidad y resistencia a la humedad, sin embargo, si se requiere envasar sustancias corrosivas, como el ácido muriático, o abrasivas como el thinner, es necesario primero asegurarse de que la etiqueta no se deshaga con facilidad ante un derrame.
No obstante, cuando se fabrican etiquetas para productos de limpieza, lo más importante es la información, ya que la mayoría de estos artículos implican riesgos a la salud en caso de utilizarlos de manera indebida.
Para esto es necesario tener en cuenta la NOM -018, norma que señala los lineamientos que cada comercializador o productor de este tipo de productos debe incluir en sus etiquetas, con el fin de informar a los clientes sobre el manejo adecuado, así como las advertencias sobre posibles riesgos para la salud.
Seguir las determinaciones de las autoridades te ayudará, no sólo a salvaguardar la salud de tus consumidores, sino también a prevenir posibles problemas legales que incluso se traduzcan en la prohibición de la venta de tus productos.
Etiqueta de productos comestibles
Para crear etiquetas de productos comestibles, la mayor parte de las veces se utilizan materiales de papel, como el couché y bond esmaltados. Esto debido a que en muchas ocasiones, se utilizan frascos de vidrio y cajas de cartón para los productos comestibles, sin embargo, cuando se emplea el plástico soplado, principalmente para salsas y empaques apachurrables, el BOPP vuelve a ser una buena opción.
Nuevamente, la información que se contenga en la etiqueta es tan importante como el material e incluso más relevante que el diseño, ya que si no cumple con lo establecido por las autoridades mexicanas no podrá ser exhibido al público, de hecho, algunos comercializadores no aceptan el producto si no contiene toda la información necesaria.
En nuestro país, la Norma Oficial Mexicana 051 es el documento que especifica todos los datos que debe contener una etiqueta de productos alimenticios, incluyendo los llamados sellos, que forman parte de las advertencias que se utilizan con el fin de brindar información para que el cliente tome decisiones de manera más consciente, evidenciando los riesgos a la salud que representa cualquier exceso en la alimentación.
Etiquetas de productos médicos
Sin duda se trata de las etiquetas cuyo diseño y elementos mercadotécnicos tienen menor relevancia, ya que la mayor parte de las veces un medicamento o insumo clínico se compra cuando es necesario, no por gusto, además de que generalmente es recetado por algún médico.
En estos casos, tal como sucede con los productos de limpieza, es de suma importancia que la información que se muestra, cumpla con todas las especificaciones establecidas por las leyes, en cuyo caso se trata de la NOM-241 de la Secretaría de Salud.
Como verás en estos ejemplos de etiquetas de productos, conocer el mercado, los clientes y las determinaciones de las autoridades es tan importante como entender el uso y la operación que requiere cada producto, por ello, para crear las mejores etiquetas es necesario contar con profesionales especializados. Si te gustaría platicar sobre las soluciones que tenemos para ti, no dudes en contactarnos y solicitar una asesoría sin costo.