Crear y comercializar una marca propia de cerveza artesanal o industrial es el sueño de muchos, ya que no se trata de una bebida cualquiera, sino del producto de una fermentación especial, que conlleva muchas etapas para estar terminada, embotellada y lista para su consumo. Uno de los factores fundamentales que deben considerarse es el cumplimiento de todos los elementos que deben estar presentes en las etiquetas de cerveza.
El diseño es un valor indispensable en el envase de esta bebida, representa la creación de un arte que dará identidad al producto y conectará con el consumidor, sin embargo, la información que contengan las etiquetas de cerveza es igual o más importante que el atractivo estético.
Al tratarse de una bebida de moderación, la cerveza está sujeta a los lineamientos establecidos por el gobierno de cada país. Las autoridades mexicanas emitieron en 2014 la NOM-142, una Norma Oficial que tiene por objetivo establecer las especificaciones sanitarias de las bebidas alcohólicas.
El documento mencionado incluye, en el punto número nueve, un índice detallado de la información que deben contener las etiquetas de cerveza.
La legislación define como bebida alcohólica fermentada al producto que resulta de la fermentación de materiales de origen vegetal, que pueden tener distintos aditivos y cuyo volumen de alcohol ronda entre el 2 y el 20%.
La mayoría de las cervezas entran en dicha categoría y deben cumplir con el punto nueve, que establece que:
“Las bebidas alcohólicas preenvasadas deben presentarse con una etiqueta en la que se describa el producto o se empleen palabras, ilustraciones u otras representaciones gráficas que se refieran al producto, permitiéndose la descripción gráfica de la sugerencia de uso, empleo, preparación, a condición de que aparezca una leyenda alusiva al respecto.”
Además, especifica que las etiquetas de cerveza deberán adherirse o fijarse de tal forma que no se despeguen antes de llegar al consumidor, así mismo deberá colocarse una por cada botella, así como empaques colectivos.
Cada una de las etiquetas de cerveza deberá contener algunos datos fundamentales que están definidos por esta norma, como son:
Es necesario que el el frente de la etiqueta aparezcan los básicos de la cerveza:
A esta información se le puede sumar otros elementos que ayuden al consumidor a tomar decisiones , como la intensidad del amargor, sugerencias de maridaje, etc.
Otros datos obligatorios que deben estar presentes, aunque no sea en la cara frontal de la etiqueta, son:
En caso de que sea un producto importado, deberá contener la información fiscal del importador mexicano, ya sea persona física o moral.
Al tratarse de una bebida alcohólica, las etiquetas de cerveza deberán portar la leyenda "EL ABUSO EN EL CONSUMO DE ESTE PRODUCTO ES NOCIVO PARA LA SALUD".
La norma especifica que esta frase deberá escribirse con letra mayúscula y en tipografía Helvética condensada, con un color que contraste con el fondo y su tamaño será proporcional al del envase, puede oscilar entre 1.5 y siete milímetros. Alrededor de la leyenda deberá existir un espacio libre de cuando menos 3 mm.
Es importante que la advertencia sea totalmente visible y no esté cubierta por ningún sello, faldón, envoltura o cualquier elemento que estorbe a la vista. Además, en las cajas y canastillas también deberá incluirse la frase, en un tamaño de 4 milímetros o más.
Además, las etiquetas de cerveza deberán portar los símbolos referentes a la prohibición de consumo a menores de 18 años, a mujeres embarazadas y la conducción bajo la influencia del alcohol.
Otro de los elementos en las etiquetas de cerveza es la forma en que se presenta la información, esto debe ser con tipografía fácil de leer.
La NOM-142 especifica que, si bien se pueden incluir palabras en distintos idiomas, la información obligatoria debe estar escrita en español, con caracteres legibles, claros y haciendo contraste con el color del fondo para que no se preste a confusión alguna.
La etiqueta es un espacio para comunicarte con tu consumidor, mientras más clara sea la tipografía, más fácil se compartirá la información y mejor será la experiencia de usuario.
Se trata de un elemento que no es obligatorio por la ley, pero es necesario para aquellos productos que son distribuidos en tiendas y otros puntos de venta tipo retail.
El UPC es una versión sintetizada del código de barras UPCA, también llamado código numérico.
Sin este instrumento, tu cerveza no podrá ser comercializada por los establecimientos formales, ya que es indispensable en la gestión de inventarios y en el registro de precios.
Para que tu código de barras funcione de forma adecuada, asegúrate de que el fabricante de las etiquetas las imprima de manera bien definida, es decir, usando tintas que produzcan colores sólidos y contrastantes.
Más allá de las disposiciones legales, es importante añadir información de tu marca que ayude al cliente a saber más sobre ti y tus productos. Puedes incluir tus cuentas de redes sociales, historia sobre la empresa o el lugar de origen, así como cualquier otro elemento narrativo que te ayude a generar identidad y empatía entre la marca y el consumidor.
Es importante que esta información se manifieste de manera coherente con el diseño, para crear un producto gráfico que refleje el espíritu de tu cerveza.
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